Los remedios de la abuela

ZANAHORIA Y ADIÓS A LAS BOLSAS DE LOS OJOS

Una zanahoria triturada y colocada media hora sobre los ojos.

Los ojos pueden jugarnos malas pasadas hinchándose con la aparición de feas bolsas en la parte inferior, la gran mayoría de las veces son agua y gran parte de grasa. Pueden deberse también simplemente a algo de cansancio, o quizá a algún pequeño enfado que nos ha llevado a llorar. 
Pela una zanahoria y tritúrala con ayuda de una picadora o batidora, coloca la pasta conseguida en sobre unos trozos de algodón y por último colócatelos sobre los ojos, deja que actuen durante unos treinta minutos y listo.
Lo más aconsejable es que lo hagas al menos tres veces por semana y siempre antes de irte a dormir. 



LECHUGA CALIENTE PARA LOS TOBILLOS HINCHADOS

Hojas cocidas y puestas a modo de vendas.

El cansancio excesivo, la acumulación de líquidos, el sobrepeso, o el abuso de alimentos con demasiada sal, pueden ser algunos de los motivos que pueden provocarnos una inflamación en los tobillos. Coloca a hervir medio litro de agua y unas cuantas hojas de lechuga, ocho o diez serán suficientes. Después déjelas reposar unos cinco minutos y a continuación ponte las hojas alrededor de los tobillos, como si fueran unas envolturas o unas vendas. Bastará media hora para que te sientas mejor y tus tobillos estén rebajados. Debes repetir el consejo por lo menos tres veces a la semana para que las molestias desaparezcan.




TENSIÓN PERFECTA DESAYUNANDO UVAS

Comenzar el día con un rico desayuno.

Si tienes la tensión arterial alta de una manera puntual, prueba a desayunar uvas. Lo más importante es que debes ser constante y empezar el día con uvas al menos diez días. Pueden tomarse crudas, o licuadas en versión zumo natural. Pero atención si además de la tensión, eres diabético, consúltalo primero con tu médico, ya que mejorarías algo, pero empeorarías otra cosa, por el exceso de azúcar que tiene esta suculenta fruta.